La empresa ha consolidado, a través del tiempo, un fuerte lazo con su tierra, el Piamonte, una región localizada en el noroeste de Italia, un territorio rico y caracterizado en su mayoría por la presencia de colinas y montañas. Las más de 45.000 hectáreas de vid están localizadas en la zona de colinas y prealpina, donde, gracias al clima y a la tradición vitivinícola, pueden producirse vinos de elevada calidad cargados de perfumes y de fragancias intensas. Hay más de 20.000 bodegas distribuidas por toda la región del Piamonte que producen en total 300 millones de litros de vino al año, la mayor parte de los cuales, obtenidos con el cultivo de cepas autóctonas.
Esta peculiaridad ha hecho que 17 vinos DOCG y 42 DOC conocidos a nivel mundial hayan sido reconocidos a lo largo de los años.
La prestigiosa tierra del Moscato d’Asti, incluida en el patrimonio mundial de la UNESCO, representa 9700 hectáreas de viña dedicadas principalmente a la producción de Asti DOCG.
El Piamonte también es conocido por otro producto tradicional italiano, típico de esta región: el vermut. El vermut es un vino fortificado que toma su nombre del nombre alemán de la artemisa: Wermut, la principal hierba (Artemisia Absinthium) utilizada en su preparación. Fue inventado en 1786 en Turín por un conocido destilador de esa época, Antonio Benedetto Carpano. A partir de ese momento el producto se difundió por toda la región. Los habitantes del lugar comenzaron a mezclar el vino, el mosto y el azúcar, de forma cada vez más hábil, con hierbas y especias locales cuidadosamente seleccionadas, creando una bebida única que, aún en la actualidad sigue siendo reconocida y apreciada en todo el mundo. Perlino es considerado como uno de sus productores más reconocidos.
El establecimiento se encuentra dentro del municipio de Asti, una ciudad histórica en el corazón del Piamonte cercana a los centros poblados más importantes de Langhe y Monferrato, a pocos kilómetros de Alba y a una hora de camino de Turín.
La ciudad conserva aún hoy los recuerdos de todos los períodos de su glorioso pasado representados en sus monumentos, murallas, torres, símbolos y conmemoraciones, tales como el Palio de Asti, que hoy en día es una de las celebraciones más significativas de la esencia más pura de la historia y del carácter de esta ciudad. De hecho, Perlino, utilizando en su nuevo logotipo corporativo algunos de los elementos del Palio y elementos arquitectónicos históricos, ha querido mantener vivo el lazo que lo une a su ciudad y a sus tradiciones, signo de una unión indisoluble incluso en el devenir futuro de la empresa.